Esquiar es cosa de guapos...

Siempre pensé que esquiar debía ser emocionante. Una sensación de vértigo, (aunque no me gusta) pero si la velocidad, una sensación de goce al apreciar el paisaje mientras se desciende la montaña. Sin embargo, este deporte tan peculiar se está poniendo un poco tonto. Se comenta que este año la nieve será otra cosa. Caray! es que se podrá llevar en nuestra vestimenta el sonido de una samba o rumba, y nuestro traje irá con una estufita a cuestas. Ni que hablar de los nuevos esquies con sensores para evitar las caídas. No dejan de inventar artilugios para llevar encima, con el afán de acompañar los tiempos modernos, y más de uno se hará merda contra un pino.Ya verán. Silvana.