11 noviembre 2005

El cuento de la semana: "Bienvenidos a Familia"

Determinante las pelotas, dijo el pastor. Yo estoy dándole la espalda a nuestro Señor para estar con vos y así me respondés. Sigo sin entender, ¿por qué no te querés casar conmigo? Porque apenas te conozco. Ni siquiera sé tu nombre. Padre Alberto me llamo. Bueno, sin Padre desde hoy, supongo… hasta que tengamos hijos. ¿Hijos de quién? ¿Qué estás diciendo? Yo vine a contarte que le mentí a mi mamá y que le dí veinte centavos de menos al fiambrero y vos me salís con lo linda que soy. Yo esperaba esto del avemaría o algo más tradicional. ¿No te parece un poco exagerada la penitencia? Si vos supieras lo duro que es ser cura. ¡Pero lo elegiste vos! Ojalá, mi viejo me metió acá. ¿Y yo tengo que pagar el precio de tu quilombo familiar? Bueno, bueno, no digas quilombo que estamos en la casa del Señor. Y por favor andá a buscar a alguien de la parroquia que tenga la llave de este confesionario, que tengo hambre. (José Antonio Bello). Blog del autor: http://miscondolencias.blogspot.com/