03 octubre 2006

Que yo te escribiré un par de canciones...

tratando de ocultar mis emociones.

-¿Dónde está la magia?- me preguntas. -Qué se yo cariño, cada uno se la tiene que inventar, ¿no crees?- le respondo. Pues no, me dices con ojos asustados. Necesito tener los pies en la tierra, encontrar paz, caminar lento pero seguro.

Vale, pongamos un ejemplo: te sobra tiempo para hacer lo que quieras una de éstas tardes de otoño, que más parece primavera por el calor que hace. Tomas un libro y decides pasar el tiempo.

Llamo al timbre de tu casa y te invito a tomar un café, pero no en el bar de la esquina. -Vamos a Sitges – te digo. La tarde está preciosa. Caminemos cerca del mar, sin decir palabra. Compartir silencios tiene su encanto, y que aceptes... es parte de la magia ;) -Vamos haciendo historia-, “porque conozco esa sonrisa, tan definitiva”.


Powered by Castpost - Historia entre tus dedos - Eros Ramazzotti

Letra: Yo pienso que, no son tan inútiles, las noches que te di. Te marchas y que, yo no intento discutírtelo, lo sabes y lo sé. Al menos quédate solo esta noche prometo no tocarte estás segura. Tal vez es que me voy sintiendo solo, porque conozco esa sonrisa, tan definitiva, tu sonrisa que a mi mismo me abrió tu paraíso. Se dice que, con cada hombre, hay una como tú, pero mi sitio (luego) lo ocuparás con alguno, igual que yo, mejor, lo dudo. Por qué esta vez agachas la mirada me pides que sigamos siendo amigos. Amigos para qué maldita sea, a un amigo lo perdono, pero a ti te amo, pueden parecer banales, mis instintos naturales. Hay una cosa que yo no te he dicho aún, que mis problemas sabes que se llaman tú. Solo por eso tú me vez hacerme el duro, para sentirme un poquito más seguro. Y si no quieres ni decir en que he fallado recuerda que también a ti te he perdonado y en cambio tú dices lo siento no te quiero, y te me vas con esta historia entre tus dedos. Que vas a hacer, busca una excusa y luego márchate porque de mí, no debieras preocuparte, no debes provocarme Que yo te escribiré un par de canciones tratando de ocultar mis emociones, pensando pero poco en las palabras y hablaré de la sonrisa, tan definitiva, tu sonrisa que a mi mismo, me abrió tu paraíso.