13 noviembre 2005

Descubren parte del código cerebral de la visión

¿Crear mundos virtuales en mi cabeza?. Bueno, primero que nada elijiría Montevideo, por supuesto, la casa de mis viejos, el mar, los lugares de encuentros con mis amigos, la familia, las guerras de agua en carnaval, el "ring raje", ir al Estadio con mi padre a ver a Nacional ... ¿y podría desplazarme en cualquier momento?. Interesante, pero ... me temo que me faltaria el placer de los abrazos, porque las sensaciones, ¿dónde quedarían?. Veamos lo que explica la noticia. Silvana.
Un estudio realizado por el Instituto Tecnológico de Massachussets con macacos ha desvelado al menos una parte del código de funcionamiento que siguen las neuronas durante la acción de “ver”. Gracias a un algoritmo informático, ha sido posible describir los patrones de estos procesos, que se llevan a cabo en milésimas de segundo, permitiendo comprender mejor cómo se gestiona la información visual en el cerebro. Conocer estos códigos puede servirnos para crear, por ejemplo, realidades visuales inexistentes que nuestro cerebro lea como reales, tal como ocurría en la película de ciencia-ficción Matrix, y mejorar así los sistemas de visión artificial. Fuente: http://www.tendencias21.net En la actualidad, los científicos no pueden “introducir” artificialmente información visual en nuestros cerebros debido a que aún desconocemos el código que utilizan las neuronas para “leer” visualmente la realidad que nos rodea, a partir de la información que recibimos de los estímulos. El estudio ha sido realizado por los investigadores James DiCarlo, profesor asistente de neurociencia del McGovern Institute, y Tomaso Poggio, profesor de neurociencia y comportamiento humano del mismo instituto. Los resultados fueron publicados por la revista Science. DiCarlo y Poggio pretendían conocer cómo trabajaba el cerebro para crear inteligencia. La capacidad de reconocer objetos visualmente constituye una de las cuestiones más complejas acerca del funcionamiento cerebral y, a nivel informático, es aún más difícil de reproducir que imaginarlo por medio del razonamiento.